El poder de una flor. Por un mundo más bello. Una flor roja, sencilla y hermosa, frágil y fuerte, como la mujer que la representa.
Imprevisible, la amapola crece allí donde nadie se lo espera, y encanta la ciudad de su magia. Su eclosión se representa en las líneas urbanas de sus ...El poder de una flor. Por un mundo más bello.
Una flor roja, sencilla y hermosa, frágil y fuerte, como la mujer que la representa. Imprevisible, la amapola crece allí donde nadie se lo espera, y encanta la ciudad de su magia. Su eclosión se representa en las líneas urbanas de sus tres frascos.
Kenzo inventa el perfume de esta flor sin olor. Una fragancia inesperada, sensual y envolvente. La Casia y el Espino Blanco se añadieron a su finura.
La Violeta de Parma, sus facetas empolvadas y sensuales. Por último, el absoluto de Vainilla Bourbon y los Almizcles Blancos envolvieron estas flores con una suavidad adictiva. Un floral empolvado con una seña de identidad reconocible entre todas.